Vie. Sep 29th, 2023

A Minglana sube su primer NFT al Internet «libre» del futuro

Es mucha tela la que hay que cortar para tratar de explicar lo que hay detrás de este titular sin que quede farragoso, ya que la mayoría de términos que implica la explicación no son de uso común. No obstante, nos proponemos intentarlo. Aunque, este es un artículo de la sección Autosuficiencia Económica, el título tampoco invita demasiado a relacionarlo. 🤷‍♂️

Debido a la complejidad, te invitamos a investigar cada aspecto del artículo pinchando en los enlaces que proponemos. 🕵️‍♂️

En primer lugar, queremos explicar lo que hemos llamado «Internet libre». Se trata del InterPlanetary File System, y es una red de nodos repartida por todo el mundo de la que cualquiera puede participar instalándose un programa de código abierto y cediendo un poco de su disco duro. Si recuerdas cómo Napster, eMule o los Torrent nos han ayudado a hacer de Internet un sitio más democrático, libre y accesible, entenderás que puede llevarse del mismo modo la experiencia al propio Internet. El protocolo está pensado para que nadie en concreto tenga control sobre los contenidos y para que sea fácilmente preservable (es ampliamente escalable) el conocimiento de la humanidad ya que no hay un servidor que pueda bloquearse o apagarse para impedir que se acceda a los contenidos. Además, logra una distribución de los contenidos mucho más eficiente. 🌎

Aquí llegamos a otro término importante: «descentralizado». Y además está de moda, porque el centralismo limita la libertad y la autonomía (que nos lo digan a los pueblos periféricos del estado español, ¿eh?). Comprendiendo que cada uno tiene un trocito del sistema, y que de algún modo ese sistema se gestiona democráticamente mediante autogobierno, vamos acercándonos a lo que queremos contar; pero lo haremos mejor mediante un ejemplo. Pongamos una red social como Facebook, ¿sabías que todo lo que subes allí pasa a depender de la empresa de Zuckerberg y que si le da la gana lo borra o lo usa para fines comerciales (junto a toda la serie de datos que puede obtener de tí incluso hasta hacer un perfil psicológico de tí que ni tu madre sería capaz de hacer)? Deberías saberlo si eres usuario pues, al crear tu cuenta le diste a un botoncito que significaba que «Aceptabas sus términos y condiciones«. Bueno, pues esto ocurre porque los servidores están en poder de la empresa y funciona de forma «centralizada» siendo gobernada por su consejo directivo. De evitar eso también se trata todo esto, y para ello nos hemos creado una cuenta en Woonkly, una red social descentralizada. Es decir, una red donde los archivos están alojados en InterPlanetary File System y, además, tú eres dueño de lo que publicas; siendo libre de venderlo, subastarlo, compartirlo gratis, o borrarlo cuando quieras. Y para entender el cómo funciona tenemos que pasar a hablar de blockchain y NFT. ⛓

Sin duda habrás oído eso de blockchain, y seguro que te viene a la cabeza también la palabra «Bitcoin» de la mano. Por ahí van los tiros. La traducción de blockchain es literalmente: cadena de bloques pero, para no enredar mucho, diremos que es como una gran hoja de cálculo compartida por todos en la que se van registrando transacciones. Eso, lo que permite es que cualquiera pueda acudir a ella para validar una operación; por ejemplo, así a grandes rasgos, en la que yo te paso 1 bitcoin a tí (lo descuento de la celda que contiene mi saldo y lo sumo instantáneamente en la que contiene el tuyo, resultando un medio de pago extraordinariamente rápido, seguro y eficiente) o en la que también puedo consultar quien es el propietario de una imagen. 🖼

Si hasta aquí has comprendido, pasamos a explicar un poco mejor el último punto. Del mismo modo que podemos saber quién es el propietario de un Bitcoin, que al fin y al cabo es un «token», podemos «tokenizar» prácticamente cualquier cosa por medio de contratos. Si un token puede tener un propietario (o varios) y podemos asociarle prácticamente cualquier activo digital, podemos hacerlo con las imágenes, canciones, audiovisuales… otorgándote la propiedad y las diferentes derivaciones de tu uso. Si, por ejemplo, subes un dibujo que quieres comercializar, puedes cobrarle a las personas que quieran tener su propiedad porque la tecnología te lo permite. Todo esto tiene un término y es NFT (non fungible token). Estos activos, pueden guardarse en una billetera digital de la misma forma que un Bitcoin, en realidad están en una Blockchain, pero una clave privada que solo tienes tú en tu billetera es la que te da el acceso al archivo y te permite venderlo o compartirlo. 📃

Pues bien, la cuenta que hemos creado en Woonkly nos permite todo eso. En esa red social (que actualmente está en pruebas) hemos tokenizado una captura de pantalla del estreno de nuestra web aminglana.org y ahora es un NFT del archivo que está en la InterPlanetary File System. Puedes consultarlo aquí. 🤙

Captura de nuestro primer NFT en la red Woonkly.com

Si quieres profundizar en un lado más filosófico/espiritual de todo esto que, aunque suene un poco a chino, es tremendamente revolucionario, el usuario de twitter @ArcturoPisanni nos ha compartido gratuítamente su libro «Woonkly Torch: del patrón Dólar a la Era Bitcoin. Descifrando las claves ocultas del ‘Reseteo Mundial‘» que aún no hemos leído pero promete bastante. 📗


Por favor, deja tus dudas en los comentarios para que podamos ir orientándonos sobre qué contenidos profundizar respecto a estos temas, pues queremos ir de la mano hacia el futuro aprovechando cualquier oportunidad de alcanzar la #AutosuficienciaEconómica. Y es que no damos consejos de inversión, pero si le ves potencial al proyecto (la red social tiene su propia criptomoneda, el WOOP, a punto de ser listada en los principales exchanges), puedes entrar al canal de telegram de su comunidad a informarte o ver los seminarios de Mr. Santos, su creador, en su canal de Youtube.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *